Ir al contenido principal

Distancia

La distancia puede tener muchas medidas. A veces pueden ser km, otras veces millas, pero incluso los mm son distancia. En muchas ocasiones nos podemos agobiar porque sentimos a la gente muy encima nuestro, e incluso sentir que apenas podemos respirar con comodidad. Esto suele pasar con la universidad, con los exámenes, cuando estás trabajando... Parece que no tienes distancia entre tus obligaciones y tú, y que todo llega a superarte en algún punto.

Esto no quiero que sea un drama. Otras veces nos pasa todo lo contrario. Estamos tan al margen, que sentimos como si apartásemos a las personas y a las cosas de nosotros. ¿Nunca habéis tenido esa sensación de que la gente pasa de ti, o se olvida de ti? ¿O de que estás perdiendo cosas o personas que realmente valorabas?
La distancia puede unir, o puede separar.
La distancia puede unir, o puede separar. Se puede estar a un solo mm de lo que más quieres, pero sentirlo completamente distante. O puedes estar a muchos km y tener la sensación de que está a tu lado. La distancia es muy relativa, pero siempre hay que tener en cuenta que tenemos que cuidar lo que queremos y tenemos.

No os infravaloréis. A veces puedes encontrar distante a la gente por muchos motivos, pero, ¿por qué mayoritariamente ni siquiera nos acercamos y preguntamos si va todo bien? Otras veces nos distanciamos porque necesitamos tiempo y espacio, porque la vida y sus obligaciones nos pueden ahogar, o porque ocurren cosas que nos apartan de todo. Cuando nos pasa eso, el sentimiento de soledad suele ser ENORME, pero siempre nos gustaría tener a alguien que nos preguntase: "oye, ¿va todo bien? ¿Necesitas algo? Puedes contar conmigo para lo que necesites". No está de más recordarlo, y demostrar que tenemos que cuidarlo, pero principalmente debemos mantener sanos a nuestra mente y a nuestro cuerpo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Mi viaje a El Aaiún, Argelia: La vuelta

 Después de los 10 días de experiencia en los Campamentos, llegó el momento de irse. Ese día lo recuerdo con nitidez, salvo por el cambio de horas. Tuvimos una despedida agridulce. Las familias se despidieron de nosotras, recogimos todo el equipaje propio que llevamos, y sólo nos quedaba esperar a la hora para irnos. El último día fuimos al mercado, y me compré un poco de maquillaje. La madre de mi familia me regaló entonces una melfa y un burka que actualmente lo utilizo como fular o pareo. Ese mismo día también fuimos a despedirnos de otra familia: la de Jadi. Jamás pensé que esa sería la última vez que la vería. Le entregamos ropa que le habíamos llevado de mi familia, y me emocioné al ver que llevaba puesta ropa que yo utilizaba cuando era más joven. Me resultó muy bonito porque me recordaba a mi yo de la infancia. No nos esperaba, por lo que se echó incluso a llorar de la emoción de nuestra visita express . Esa sonrisa tan pura al vernos, al ver que le llevábamos regalos, la f...

Insomnio y realidad distorsionada

 Es muy fácil hablar de insomnio cuando una persona tarda en dormirse. En sí, es lo que significa, ¿no? Pero este trastorno puede ir mucho más allá. No te permite descansar como es debido, se acortan las horas de sueño y de descanso, por lo que puede acarrear muchísimas consecuencias y que éstas lleguen a ser nefastas. Por un lado, está la falta evidente de descanso que el cuerpo físico necesita para recuperar su energía. Por otro lado, estamos aumentando los pensamientos constantes y favoreciendo que se puedan crear bucles psicológicos en nuestra mente. Al fin y al cabo no conseguimos desconectar, y mucho menos dejar a un lado la mente. Es por esto que se pueden desarrollar trastornos de ansiedad o depresión con insomnio. Debemos tener en cuenta que estamos favoreciendo a la posibilidad de ver la realidad distorsionada como puede ocurrir con un trastorno de ansiedad pero que va más allá por la falta de sueño y sus posibles efectos secundarios. Por ejemplo, es mucho más sencillo ir...

Semana 5 de confinamiento: Desesperante.

Hoy es 22 de abril del 2020. Llevo exactamente 41 días de confinamiento. Es curioso porque mi etapa universitaria la empecé en la RMI de Bilbao en la habitación 41, viviendo sola pero compartiendo baño con Celia primero, y Amanda después. Han pasado 3 años y ahora me encuentro en un piso sola, en Santiago de Compostela, compartiendo todo el espacio conmigo misma. Mucha gente me pregunta que cómo lo llevo, y ya ha llegado un punto en el que no sé qué responder. ¿Cómo lo llevas? Esta situación me está dejando KO. Físicamente me intento mantener, pero psicológicamente... ahí está el problema. El día tiene 24 horas. Pues bien, de todas ellas me paso como 10h intentando ser productiva. Me levanto agotada, porque no duermo bien, o ni siquiera que ni descanso. Me intento ir a dormir un poco antes, pero hay días que he permanecido despierta hasta incluso llegar a ver el amanecer. Muy bonito y tal, pero el cansancio se nota. Hasta tengo pesadillas. Para activarme intento tomar un café o una inf...